¡Feliz aniversario! así comenzaba el mensaje que recibí hoy. Recordé que hace un año no estas aquí. Volvió a mí el dolor que sentí el día de tu partida. Parecía que el mundo entero se había detenido. Todo aquello que alguna vez tuve, y que alguna vez disfrute ya no estaba. En aquel entonces no podía entender ¿qué había hecho mal?. Nunca supe como algo tan lindo, tan duradero acababa así, de la nada, sin una explicación…sin una despedida.
¿En qué momento dejé que alguien se volviera tan importante para mí?, ¿cómo fue que olvidé que antes de él ya tenía una vida?, ¿por qué no puedo olvidar su recuerdo? no lo sé, de hecho aún no logro encontrar respuesta. Cuanto menos piense en él resulta mejor para mí.
Con el pasar del tiempo se hicieron presentes los amigos, pero mis respuestas siempre eran las mismas: “Tú no entiendes”. “Era el amor de mi vida”. “Jamás volveré a amar así”.Creo que todo el mundo las ha dicho alguna vez.
Siempre que alguien sufre una decepción amorosa y escucha una canción de desamor, reacciona igual. Pareciera que fue hecha a su medida, pues describe su historia tal cual sucedio. Al pasar por algún lugar les llega la melancolía porque resulta que era su sitio favorito.
Amistades en común, familiares que todavía frecuentan e incluso Facebook, se vuelven los mejores aliados para saber cada movimiento.Una quisiera saber si ya está con alguien, si es feliz, que hace o que deja de hacer, para calmar nuestra alma.
Me siento afortunada pues, yo tuve la ayuda necesaria en el momento indicado. Escuché varias historias de chicas o incluso chicos que no acabaron bien: algunos terminaron suicidándose. Parece tonto pero para quienes lo hemos vivido, no tanto.
Hoy solo puedo decir que de aquella experiencia aprendí mucho. Bien dicen que “lo que no te mata te fortalece”. Ahora entiendo a qué se refiere.
No podemos vivir añorando el pasado y mucho menos a la gente que ya no está. Ni siquiera preguntarnos el porqué, pues todo en esta vida sucede para nuestro beneficio. Lo único que podemos hacer, es darles las gracias por lo que vivimos, desearles lo mejor y despedirnos. Hay que dejar ir, hay que soltar, hay que desprenderse. En la vida lo más importante es saber decir adiós, entender cuando una etapa termino y con los brazos abiertos recibir una nueva, sabiendo que el amor… no necesariamente es eterno.
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